Ignacio Carrion
1928-07-31 2008-02-09
July 31st, 1928 - February 9th, 2008
Yole was the second eldest of the 14 children of Pilar and Hermogenes. He loved his homeland Puerto Rico. He loved raising animals and always had a large variety of animals on his land. Yole was a quiet, humble, simple man, with high spiritual values.
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Yole was the second eldest of the 14 children of Pilar and Hermogenes. He loved his homeland Puerto Rico. He loved raising animals and always had a large variety of animals on his land. Yole was a quiet, humble, simple man, with high spiritual values.
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Semblanza
Ignacio Carrión Torres, conocido con cariño como Yole, nació el 31 de julio de 1928, hijo de Hermógenes carrión y Pilar Torres. Segundo hijo de una familia de 14 hermanos, creció y se educó en un hogar de altos valores morales y espirituales. Su niñez fue de amor y dedicación a su familia y al trabajo en la finca, lo que compartía con sus padres y hermanos. Además de realizar las tareas de su familia, ayudaba a sus abuelos maternos a recoger las crías del ganado. Era uno de los nietos preferidos de sus abuelos, quienes amorosamente siempre le guardaban el café y la cena de la tarde para cuando terminara sus labores.
Cuando llega a joven adulto tuvo la oportunidad de viajar a los Estados Unidos, a trabajar en uno de los estados del norte. Allí se estableció y al pasar el tiempo se casa con una joven mexicana Maria Concepción Solís, con la cual procreo siete hijos. Ignacio Jr. Maria, Alberto, Gabriel, Olivia, Isabel y Martín.
No obstante la distancia, nunca olvido su terruño, por lo que siempre venia a Puerto Rico a visitar a sus familiares. En uno de esos viajes compró un predio de terreno y construyó una casa, siempre con la idea de regresar a su país natal. Ya en este momento, sus doctores le habían recomendado un país tropical para que su salud mejorara. Su esposa vino, pero no quiso quedarse, ella regresa a los Estados Unidos mientras el se queda viviendo en Puerto Rico.
Después de un tiempo conoce a Zoraida Ríos Mojica; Zory, a quien se une y de esa unión nacen Mercy Y Javier a los cuales amó mucho por ser sus más pequeños retoños. Gracias a Zory quien lo comprendió, amó, ayudó y celebraba lo que hacía, se sentía muy contento.
Como le gustaba mucho la crianza de animales, convirtió su pequeño predio de terreno en un pequeño zoológico al tener una gran variedad de animales.
Hoy toda la familia y amigos pueden sentirse felices y muy agradecidos de Dios por haberles permitido conocer y disfrutar de un ser especial, hombre callado, humilde, sencillo, muy servicial con altos valores morales y espirituales. Fue un hombre de bien que compartía con todos y no ofendía a nadie. Si todos pudiéramos emular su ejemplo, tendríamos un Puerto rico mejor cada día.
Por estas y muchas cualidades mas que el poseía, debe haber sido premiado en el Reino de los cielos con la Vida Eterna.
por: Virginia Cruz
We miss you Tio and have fond memories of you.